lunes, 2 de abril de 2007

Eco

Mamón.


Buena palabra para describirme, gracias. Enserio, excelente.


Tomo mi charango, le doy a las primeras notas de "Claudia", y no más allá del 5º compás me sale una chuchada del porte de un buque porque me equivoqué. La maldita manía de tocar perfecto se expresa en ese momento, cuando golpeo la mesa con la mano derecha. "Niko! que fue eso?!" .. "Nada, se cayo algo nomas". Nada... justamente eso es lo que pasa. Nada sale bien.


Cuesta trabajo acostumbrarse a que el mundo no es perfecto. Esos momentos de rabia cuando hasta el detalle más infimo falla no le faltan a nadie. Y cuando pensabas que las cosas no podian salir de otra forma que no fuese BIEN... Y pasa, mas que nada, en el amor (o enamoramiento, elijan ustedes): necesitas de toda tu capacidad para hacer correr las cosas de forma perfecta, pero sabes que no tienes esa capacidad. Ahi es cuando la cosa se complica. Si alguien leyó El Tunel, me va a entender, y no va a poder negar que alguna vez en su vida tuvo esas malditas predicciones pesimistas sobre le desenlace de una situacion. Es humano, a todos nos pasa. En ese momento, crecen millones de insectos en tu cerebro, que empiezan a roer tus lóbulos hasta llegar a la materia blanca, batiendo sus alas en un zumbido infernal que infla tu cabeza hasta que sientes tus manos humedas, tu cara roja y los ojos a punto de salir despedidos de sus lugares.


"Que chucha tiene que ver esto con el charango?" estaran preguntandose entre dientes, tal vez hasta riendose, algunos de ustedes. Pasa que, cuando sientes que la situacion no tiene por donde mejorar, y te hundes en el eterno chliché del mamón (ya saben, uno nisiquiera intenta. Simplemente llora por la "incapacidad" de hacer algo y sigue constante en esa estupida idea de no hacer el ridiculo) te das cuenta que tiene mucho que ver con el charango. ¿A quien demonios le importa si te equivocaste en una nota? Sigue con la musica, como si no hubiese pasado nada, aplasta tu pequeño error con el sonido que emiten esas cuerdas, con la seguridad. ¿Quien cresta te dijo que lo perfecto existia? Si tu no tienes esa capacidad, nadie la tiene. Tan simple como eso. Asique aprende de una vez por todas a disfrutar de lo imperfecto, de lo que no esta planeado.


Total, de eso se trata. Los fracasos no existen, solo los cambios de planes. El destino tampoco. nadie se aseguro de escribir con lujo de detalles nuestro paso por el mundo.


Asique disfruten y no dejen de hacer lo que sus mentes les sugieren, porque nunca van a saber si tendran otra oportunidad mas adelante.
Buscando máscaras.
Nunca lo hagan.

2 comentarios:

dani dijo...

Interesante el post de hoy, en serio. Me hace reflexionar un poco sobre cómo llevamos la vida buscando un camino sacado de una película, cuando queremos enamorar a alguien de tal o cual manera, cuando empujamos todo en una dirección sin considerar que la mayoría de las cosas están por sobre nuestras capacidades.

buscando máscaras. no hay que buscarlas, es verdad, pero todos las tenemos, y es rancio al final del día tener que sacárselas, tu piel está húmeda y casi musgosa por la falta de ventilación que provoca la máscara.

en fin...

dani dijo...

como que no dije nada en concreto pero me gusta lo que escribiste. cuando reaccionamos impulsivamente de pura rabia, cuando algo dentro de tí no encaja, la impotencia de la imperfección a la que no nos acostumbramos siempre, a la que somos reacios de aceptar..

no sé

hoy divago mucho, al parecer